Beneficios de moverse
Todos sabemos que mantener un estilo de vida activo reporta numerosos beneficios: desde un mejor sistema cardiovascular, una mejor postura y equilibrio y unos pulmones más sanos hasta reducir el riesgo de desarrollar enfermedades graves.
Por eso el beneficio de mantener un estado de salud y una condición física buena supone ser capaz de realizar las actividades cotidianas eficazmente con unos niveles adecuados de fuerza, resistencia, flexibilidad y condición cardiorrespiratoria. Aumentar el nivel de actividad reduce la posibilidad de desarrollar enfermedades tales como: hipertensión, enfermedad cardiovascular, accidente cerebrovascular, diabetes o cáncer.
Para mejorar la salud es importante que seas físicamente activo y que sigas unas pautas que propone la American College of Sports Medicine (ACSM, Universidad estadounidense de Medicina del deporte), en colaboración con la American Heart Association (AHA, Asociación estadounidense del corazón). Estas recomendaciones son válidas para cualquier persona con una edad comprendida entre los 18 y los 65 años. Por lo general, recomiendan realizar al menos 30 minutos de actividad física cada día.
Los beneficios específicos del ejercicio son:
Mejor sistema cardiovascular. El corazón se contrae eficazmente y la sangre circula con menos esfuerzo, lo que mejora el riego sanguíneo en las arterias coronarias. Hacer ejercicio con regularidad puede reducir la frecuencia cardiaca incluso en reposo. También mejora la elasticidad de los vasos sanguíneos, lo que ayuda a mantener una baja tensión arterial.
Sistema musculoesquelético más fuerte. El aumento de la masa ósea y muscular y de la fuerza muscular así como de la flexibilidad garantiza la prevención de la osteoporosis y la sarcopenia, a la vez que sirve de apoyo para la columna vertebral y los músculos en general. Mantenerse activo también ayuda a prevenir caídas y fracturas en las personas de más edad.
Respiración más despejada. Una mayor capacidad de los alvéolos en los pulmones para dilatarse y asimilar el oxígeno así como para asegurar un volumen respiratorio adecuado al limitar la reducción que se produce como resultado del envejecimiento.
Mejor metabolismo y composición corporal. La actividad física ayuda a reducir la masa grasa corporal, a aumentar la masa magra corporal y mejorar el cociente de masa magra a grasa. El gasto energético aumenta, lo que ayuda a controlar el peso corporal.
Aspectos psicosociales positivos. Con un mejor estado de salud puedes disfrutar de la vida plenamente y realizar cualquier tipo de actividad durante más tiempo. Participar en grupos de deportes también ayudar a desarrollar las relaciones sociales y reduce el riesgo de depresión y ansiedad.
Fernando Santa Isabel